NAO Argentina (New American Oil) opera en el corazón del desarrollo energético del país: Vaca Muerta. Con su refinería en Plaza Huincul y la planta de Challaco, NAO fortalece el midstream y el downstream, garantizando abastecimiento confiable, calidad de producto y eficiencia para la industria y los consumidores. A través de innovación, estándares de seguridad (HSE) y gestión de riesgos, NAO Combustibles impulsa una cadena de valor hidrocarburífera robusta, con mirada de largo plazo y compromiso con las comunidades.
Vaca Muerta como eje estratégico de largo plazo
Vaca Muerta no es una moda ni un golpe de suerte: es un pilar estructural para la competitividad energética de Argentina. Su potencial no se define solo por lo que hay en el subsuelo, sino por la capacidad del país para transformar ese recurso en energía y productos de calidad que lleguen, de manera segura y eficiente, a industrias, comercios y familias.
En ese contexto, el valor no termina en el upstream. Para que el recurso genere actividad sostenida, hacen falta actores confiables en las etapas intermedias y finales de la cadena. Ahí es donde NAO aporta infraestructura, procesos y equipo orientados a la continuidad operativa y al suministro responsable.
Del pozo al surtidor: el valor del midstream y downstream
El desarrollo energético funciona cuando el producto llega bien, a tiempo y con calidad. Eso es midstream y downstream, sin vueltas.
Transporte, almacenamiento y trazabilidad
Mover hidrocarburos no es solo logística: es integridad de producto y seguridad operacional. Las operaciones de transporte y almacenamiento de NAO se enfocan en mantener especificaciones, optimizar tiempos y reducir variabilidades. La trazabilidad a lo largo del recorrido permite respuestas rápidas y decisiones con datos, mejorando la confiabilidad del sistema.
Refinación y calidad de producto
La refinación es donde la infraestructura y la disciplina de procesos se convierten en valor tangible. En este tramo, NAO Refinería se centra en consistencia de calidad, cumplimiento normativo y eficiencia operativa. Resultado: productos que responden a las necesidades del mercado con estándares estables y abastecimiento previsible.
NAO en la cadena de valor
NAO participa de la cadena hidrocarburífera con una propuesta simple y potente: operar con foco en continuidad, seguridad y servicio.
Refinería de Plaza Huincul: confiabilidad operativa y continuidad de suministro
La refinería de Plaza Huincul es un activo clave para convertir materia prima en productos con especificaciones consistentes. El enfoque está puesto en la disponibilidad de unidades, la gestión de mantenimiento planificado y la mejora continua en parámetros críticos de proceso. Este esquema refuerza la continuidad de suministro a clientes y redes de distribución, incluso ante escenarios de mayor exigencia operativa.
Planta de Challaco: logística, almacenamiento y blending
La planta de Challaco integra almacenamiento, logística y blending, habilitando flexibilidad operativa para responder con agilidad a la demanda. Su rol es estratégico: equilibra inventarios, optimiza ventanas de despacho y permite ajustes finos de producto según requisitos del mercado. El resultado es un puente confiable entre producción y distribución, que acorta tiempos y reduce fricciones.
Integración con proveedores y servicio a clientes
El ecosistema energético funciona cuando los eslabones colaboran. NAO trabaja con proveedores y transportistas bajo criterios de seguridad, cumplimiento y performance, a la vez que sostiene un servicio cercano a clientes. La coordinación operativa y el intercambio de información permiten planificar mejor, optimizar rutas y cargas y asegurar entregas confiables.
Innovación, seguridad y gestión de riesgos (HSE)
Operar bien hoy y mejor mañana. Esa es la lógica.
Protocolos, monitoreo y mejora continua
La gestión HSE de NAO prioriza protocolos claros, formación permanente y monitoreo de variables críticas. Las auditorías, simulacros y revisiones post-incidente alimentan ciclos de mejora continua, con foco en personas, instalaciones y entorno. La meta es simple: cero tolerancia a prácticas inseguras y alta disciplina operativa.
Tecnologías para eficiencia y control de procesos
Desde sistemas de control distribuido hasta herramientas digitales para seguimiento de inventarios y análisis de procesos, NAO adopta tecnologías que permiten decidir con datos. Esto se traduce en eficiencia energética, menores desvíos de especificación y respuesta rápida ante cualquier anomalía. Más eficiencia, menos desperdicio, mejor huella operativa.
Desarrollo regional e impacto económico
La infraestructura energética deja huella cuando genera trabajo, demanda proveedores y mueve servicios. Las operaciones de NAO impulsan encadenamientos productivos a nivel local, con oportunidades para pymes y talento regional. El círculo virtuoso es claro: inversión + operación responsable = actividad sostenida. Esto fortalece comunidades, promueve capacidades técnicas y aporta a la diversificación económica de la región.
Mirada de largo plazo
La energía no se planifica por semana. Se diseña y sostiene con visión industrial. El compromiso de NAO es seguir invirtiendo en confiabilidad, elevar estándares de seguridad y profundizar la digitalización para ganar eficiencia y trazabilidad. Vaca Muerta es una oportunidad enorme y duradera; la clave es convertir potencial en certeza a través de infraestructura y gestión.




